Hacia Dios por los caminos de la Biblia, nº 64

Alianza de Dios con Abraham 

Christian: He leído, amigo Abraham, el capítulo 15 del Génesis. (Gn. 15), y me ha encantado. Me refiero al sacrificio que ofreciste a Dios.

Abraham: Pues mira, amigo Christian: yo estuve pensando en mis planes de futuro. Tenía mis dudas y mis miedos, pero el Señor me habló, como siempre, al corazón y me dijo: "No temas, Abram, yo soy tu protector, tu recompensa será muy grande." 

Christian: ¿Y cuáles eran tus dudas? 

Abraham: La principal de todas es que Dios me prometía una gran recompensa, tierras y descendencia numerosa, pero yo no tenía hijos. Yavé me sacó fuera y me dijo: "Mira al cielo y cuenta las estrellas, si puedes. Así será tu descendencia." 

Christian: Y tú, como siempre, creíste al Señor. Así has pasado a la historia como el hombre de la fe y el padre de todos los creyentes. 

Abraham: No lo puedo remediar. La voz del Señor me conmueve. Me dijo: "Yo soy Yavé, que te sacó de Ur de los Caldeos, para entregarte esta tierra en propiedad". Y me dijo que le ofreciera una ternera, una cabra y un carnero, todos ellos de tres años, y también una paloma y un pichón. 

Christian: Así eran los sacrificios que se ofrecían a los dioses: se sacrificaban los animales y se consumían al fuego. 

Abraham: Cierto; así lo hacía mi padre y yo seguí la costumbre. Era el atardecer. El sol se iba acercando a la línea del horizonte, acariciando y transformando en brillantes placas de oro unas tenues nubecillas. Partí los animales por la mitad y puse una mitad frente a la otra. No tardaron mucho en aparecer las aves rapaces y yo las ahuyentaba. 

Christian: ¿Y sentías dentro a tu Dios?¿O lo esperabas con impaciencia? 

Abraham: Cuando el sol estaba a punto de ponerse, caí en un profundo sueño y se apoderó de mi un terror y una gran oscuridad. Cuando se puso el sol y estuvo completamente oscuro, un horno humeante y una antorcha encendida pasaron en medio de los animales descuartizados. Gn. 15,12.17-18. 

Fue entonces cuando el Señor hizo una alianza conmigo diciendo: "Yo he dado esta tierra a tu descendencia desde el Torrente de Egipto hasta el Gran Río, el río Éufrates". De esta alianza hablaremos en otra ocasión. 

Christian: De acuerdo, amigo.