CURSO BÍBLICO
Cuaderno IV
Temas para el estudio y reflexión comunitaria de la Sagrada Escritura en asambleas familiares
SI ESO ES ASÍ... ¿QUIÉN PODRÁ ENTONCES LEER LA BIBLIA?
Rompamos el hielo
Es muy posible que, después de todo lo que hemos dicho, a cualquiera le pueda surgir la pregunta con la que iniciamos el tema: “si esto es así... ¿entonces, quién puede leer la Biblia?
En parte puede llevar razón, pero esto le ha de hacer ver que no se trata de un libro cualquiera y, por tanto, podemos darnos cuenta de la cantidad de disparates que se dicen cuando cae en manos de alguien que no tiene los elementos indispensables para acercarse a él: entonces es muy fácil decir estupideces.
Por todo esto se puede entender que la Iglesia sostenga que es importantísimo para todo cristiano estudiar la Biblia y se puede entender también que, en otros momentos de la historia, incluso prohibiera su lectura si es que no se tenía una persona experta que guiara para su comprensión.
Nosotros vamos a dar unas pistas para acercarnos a ella, de modo que podamos sacar una visión global que nos sea del máximo provecho.
Dialoguemos un poco
- ¿Qué idea tenía de la Biblia?
- Hay mucha gente, que es buena cristiana, pero que opina que leer con frecuencia la Biblia es cosa de protestantes: ¿qué opina de esa mentalidad?
- ¿No cree que los católicos tenemos un gran bache que es el desconocimiento de la Biblia?
Según todo lo que llevamos dicho, puede parecer que la Biblia es propiedad de unos pocos privilegiados. No se trata de eso, pues es la palabra que Dios da al mundo, y por ello debe estar al alcance de todos.
Pero, sin embargo, no todos han tenido la posibilidad de recibir algunos conocimientos básicos para su comprensión. Es como si encontramos una persona que no sabe leer: en sus manos tiene la Palabra de Dios pero, si no encuentra a alguien que se la lea, no podrá tenerla jamás a su alcance.
Por eso es indispensable la ayuda de los demás y, sobre todo, la experiencia de los que han empleado su vida estudiándola, para hacernos ver y comprender la actuación de Dios a través de la historia.
De esta forma nos será posible el ir adentrándonos en su comprensión y, así, llegar a participar plenamente de la luz que es Dios.
Nosotros vamos a intentar dar una visión general con unos grandes temas bíblicos que nos van a ayudar a tener una comprensión global de la Biblia, y nos van a poner en condiciones de ir aterrizando en temas más concretos y puntuales.
LA BIBLIA NO SE ESCRIBIÓ DE CUALQUIER FORMA, EN UN RATO
Venimos diciendo que la Biblia no es un libro, sino una biblioteca, y tampoco es un libro normal de los que tenemos en casa, como los que estamos acostumbrados a leer.
Es bueno que sepamos, por ejemplo, que cuando abrimos la Biblia, entre un párrafo de una página concreta que se presenta ante nuestros ojos y el que se escribió a continuación, pueden haber transcurrido siglos. Esto le está ya dando una idea de cómo se ha hecho este libro que usted tiene en sus manos.
Piense también que son muchas las vidas que se han quemado investigando, estudiando y analizando hasta el último detalle de cualquier coma que existe en ese libro. Creo que este dato le ha de ayudar para afianzar en usted una postura de confianza en la Sagrada Escritura. Esa confianza hará más fuerte su fe, pues es una prueba clara y evidente de que no se trata de un juego de unos cuantos a los que se les ha ocurrido decir unas cosas una mañana cualquiera, cosas que después los demás nos hemos tenido que creer.
En este “libro” no es una persona la que da su opinión sobre algo, sino que es la humanidad entera la que habla y la que, guiada por Dios, llega a confesarlo como el Único Creador del Universo.
Dialoguemos un poco
- Es probable que haya oído alguna vez personas que dicen: ¡A saber quién escribió eso: pudo poner lo que quisiera! ¿Cree usted que es fácil cambiar lo que dice la Biblia?
- Hay también mucha gente que dice que no cree sino aquello que ve y puede ser constatado: ¿Q1é opina de esa postura?
- Piense un poco: ¿en cuántas cosas cree usted que ni ve ni tiene posibilidad de constatar?
- ¿Cree usted que Dios vive con nosotros y va actuando en la historia de los hombres? Ponga algunos ejemplos en los que usted se apoya para sostener esto.
LA BIBLIA ES LA RESPUESTA QUE DIOS LE VA DANDO AL HOMBRE
Todos los hombres y mujeres de la historia se han preguntado siempre por el origen del mundo y de ellos mismos. Esas mismas preguntas nos las seguimos haciendo y hay un número enorme de personas que intentan darles respuesta. Cada uno quisiera ser el que tiene la exclusiva de la autenticidad y de la verdad, pero no son más que teorías que no pueden apropiarse de la certeza.
También nosotros debemos ir dándonos respuesta a esas preguntas. Por eso es bueno y necesario que vayamos teniendo conocimiento de todo lo que se dice y lo que se ha dicho durante muchos siglos.
Los cristianos tenemos una grave obligación de estudiar la Sagrada Escritura (la Biblia) por muchas razones:
- Porque es la Palabra de Dios que se dirige a los hombres para darles la luz y hacer que se encuentren con la verdad.
- El mismo Jesús lo decía: “Estudiad bien las Escrituras... porque esas Escrituras son las que dan testimonio en favor mío” (Jn. 5,39).
- Porque es algo que necesitamos para poder dar razón de lo que confesamos: da una tristeza enorme ver cómo los cristianos tienen un desconocimiento total de lo que dice la Biblia, mientras gente de sectas viene y nos deja en ridículo.
Pero lo peor no es eso. Puede que vengan y nos presenten la Biblia sacando frases de su contexto, y nos hagan ver barbaridades y decir disparates, que es lo que suele ocurrir. Incluso puede que hasta cambien frases enteras de la Biblia para que digan lo que ellos quieren, mientras nosotros nos quedamos con la boca abierta admirando lo que “saben”.
Por recordar un momento importante de la historia sobre este tema, recordemos la reacción que tuvo la Iglesia después del problema que montó Lucero, cuando propuso que cada uno interpretase la Biblia como el Espíritu le inspirase. Como digo, la Iglesia tuvo que reaccionar frenando todo aquello, pues la mayoría de la gente era analfabeta, no sabía leer ni escribir; mucho menos aún estaba capacitada para hacer una interpretación correcta de la Biblia. Por eso la Iglesia prohibió leer la Biblia sin alguien que le guiase la lectura, para evitar de esa manera los problemas que había metido Lutero.
Después del Concilio Vaticano II ( D.V. nº 25), cuando ya habían cambiado enormemente las cosas y mucha gente ya se dedicaba a estudiar la Biblia, la Iglesia quitó esas restricciones, e invitó a todos los cristianos a leerla y a estudiarla a fondo. Es más, pidió que cada cristiano tenga su Biblia como el libro sagrado, íntimo y entrañable en su casa para toda la familia.
- Porque la Palabra de Dios hace un bien enorme a todos: alimenta la fe, da sabiduría, ilumina la vida, nos ayuda a encontrar sentido a nuestra existencia. Dice el profeta Isaías: “.Aquel día, los sordos oirán las palabras de un libro, y libres de la sombra y de las tinieblas, los ojos de los ciegos volverán a ver. Los humildes aún se alegrarán con Yavé y los más pobres quedarán felices con el Santo de Israel, pues ya no habrá más opresor. Habrá desaparecido el que se reía de todos y habrán sido eliminados todos los malvados,” (Is. 29,18-20)
Nuestra fe se mantiene de la Palabra de Dios que la escuchamos atentamente, la estudiamos, la meditamos y la saboreamos. Incluso, cuando tenemos que hablar, es necesario saber por qué decimos las cosas, por eso S. Pedro aconseja también a los cristianos: “estén siempre dispuestos para responder a todo el que os pregunte sobre vuestra esperanza. Pero lo debéis hacer con dulzura y con respeto”(IPed. 3,15-16)
REFLEXIÓN FINAL
- De las cuatro razones que hemos dado para leer la biblia, indica cuál te parece más importante.
- ¿Ves correcto que los cristianos tengamos el desconocimiento que tenemos de la biblia?
- Con frecuencia ocurre que cuando alguien habla mucho de la biblia, lo catalogan de protestante ¿qué opinas de esa forma de hacer?
- ¿Crees necesario e importante para tu vida de fe el tener un conocimiento de la Sagrada Escritura?
Después de haber observado todo esto que la ciencia va descubriendo en torno a la obra grandiosa de la creación, y cuando nos detenemos a observar las maravillas que aún quedan escondidas, a pesar de que todos los hombres de todas las épocas, han llegado a creerse que lo sabían todo y que nada se les resistía, vemos que cada vez se van abriendo ventanas que nos llevan a observar la grandeza de todo lo que Dios creó y que va dejando al hombre que lo vaya descubriendo.
Cuando pienso en todo esto, siento ganas de expresar un canto de alabanza a Dios por todo lo que nos regaló. Me va a permitir Ernesto Cardenal[1] que emplee uno de sus salmos de alabanza a Dios, ya que él lo dice de una forma mucho más bonita y más expresiva que yo, y dice justamente todo lo que en estos momentos siento:
Un olivo de los nuestros es un canto a la eternidad de Dios
LAS GALAXIAS CANTAN LA GLORIA DE DIOS
“SALMO 18"
La galaxias cantan la gloria de Dios.
La galaxias cantan la gloria de Dios.
Y ARTURO 20 veces mayor que el sol
y ANTARES 487 veces más brillante que el sol.
SIGMA DE LA DORADA con el brillo de 300.000 soles
y ALFA DE ORIÓN que equivale a 27.000.000 de soles.
ALDEBARÁN con su diámetro de 50.000.000 de Kms.
ALFA DE LIRA a 300.000 años luz
y la NEBULOSA DE BOYERO a 200.000.000 de años luz...
Anuncian la obra de tus manos.
Su lenguaje sin palabras
(no es como los slogans de los políticos)
Pero no es un lenguaje que no se oiga.
Ondas de radio misteriosas emiten las galaxias
El hidrógenos frío de los espacios interestelares
está lleno de ondas visuales y de ondas de música.
En los vacíos intergaláxicos
hay campos magnéticos que cantan
en nuestras radios telescopio
(y tal vez hay civilizaciones transmitiendo
mensajes a nuestras antenas de radio)
Son un billón de galaxias en el universo inexplorable
girando como carruseles
y como trompos de música.
El sol describe su gigantesca órbita
en torno a la constelación de SAGITARIO.
Es como un esposo que sale de su tálamo
y va rodeado de sus planetas a 72.000 kms. Por hora
hacia las constelaciones de HÉRCULES Y DE LIRA
(y tarda 150.000.000 de años en dar la vuelta)
y no se aparta ni un centímetro de su órbita.
La ley del Señor tranquiliza el subconsciente,
es perfecta como la ley de la gravedad.
Sus palabras son como las parábolas de los cometas.
Sus preceptos son como los preceptos de las estrellas,
que guardan siempre sus sitios,
y sus velocidades, y sus distancias respectivas,
y se cruzan miles de veces en sus rutas y nunca se chocan.
Los juicios del Señor son justos,
no como la propaganda
y más valiosos que los dólares
y las acciones comerciales.
Guárdame de la soberbia del dinero
y del poder político
y estaré libre de todo crimen
y séante gratas mis palabras y mis poemas
¡Señor! ¡Mi Libertador!
[1] ERNESTO CARDENAL: “Salmos”