Más ripios navideños, por José Ignacio Malpica





En honor a los abuelos
que han logrado el reunirnos
año pleno de revuelos…
¡con ayuda de los cielos
lograremos resarcirnos!.

No pretendo el aburriros
al hablaros del amor..
el amor es un clamor
el amor son los suspiros
un regalo …
sin esperar favor.

El amor de los abuelos
van viviendo una vida
y no quieren el perderos
nunca de su vista.

“!Déjame contarte, nieto mío
una historia muy bonita
que me estalla en el alma…!
¡mira mi sonrisa!
Parida está de lágrimas…
y es que el tiempo
se te pasa y no te avisa…

¡Quiero contarte tanto
quiero contarte mi vida
no ves mi blanca cara
no es tan bella y lisa
cada arruga me señala
el recuerdo de una guisa
de un te quiero
o de un rogar a Dios
por el mundo entero.

Pero déjame que te cuente
antes que borre mi mente
y no sepa ni recuerde
a quien tengo enfrente.

¡Ay…! ¡ amor de abuelos…!
Yo os ofrezco mi sonrisa
Un abrazo… Un te quiero
Nada a cambio... Amor sincero.

Y a los nietos ¡qué os diría!
no dejéis escapar las hadas
¡gozad de la sabiduría,
de las canas blanqueadas!
de las miradas perdidas
de las manos cansadas
que por tu cara deslizan.

¿Y el amor de una madre …?
eso tiene otra “comía”
rodeado de infames
abusos y desmanes
¡se las comen la jauría!

Todo lo soporta,
todo lo tolera
gente de buena solera
el cansancio no le importa
¡Es parte de su entrega!

Aquí nombro sin nombrarle
a esa que fue mi madre
y a la madre de mis hijos
dos amores venerables
que completan con su talle
al hijo
y… al marido.

Una, se fue al cielo
la otra me mantiene vivo
es mi bálsamo y lucero
regalo de un Dios certero
que comparto con mis hijos

¿ Y el amor de los “maríos”?
¡No hay quien lo aguante!
¡niña,… trae el botijo!
Niña… voy “pal” cante
Niña, aquí te traigo…
¡Que dices …. ¿ Que me traes?
Unos amigos “pa” la cena
¡Esos…. “pa” tu “madre”!

(una madre, …nos alegra
y de buena, como era
pasa a ser la suegra
...el destino de la nuera)

El marido tan cambiante
¡qué figura juvenil!
con el paso de los años
se le cambia el perfil
por un saco de boniatos
¡cuando era un querubín!
Y el “marío” en la poltrona
estirando bien las patas
la cerveza o la litrona
¡niña , ...las tapas...!
¡es que el futbol “yampezao”!
¡si “yampezao” …te levantas
y así el buche espantas…!

Ella vuelve del “mercao”
cuatro bolsas en cada banda
treinta kilos bien “pesaos”
¡hoy creo que me “pasao”!
el paraguas en la boca
como al venir de parranda

¡Niña,… donde alcanzas…!
que has dejado aquí a uno
tocándose la panza
y esperando el desayuno.
¡no entiendo tu tardanza!

¡Tu es que vives en la calle!
Nada,… escusas, … patrañas
¡No te duelen las entrañas
Que no coma y me desmalle
Y se me junte con las cañas…!
De las una de la tarde

Un “mario” muy “sufrío”
un “marío” con antojos.

El moderno “marío”
no se quita el pijama
y se queda chateando
todo el día en la cama
buscando a ese ligue
como de rama en rama.

Y te cuenta las secuelas:
“ y yo me la lleve al río
creyendo que era mozuela
y resultó ser un tío
…y casi me la cuela”

Deja de hacer el tonto
y convive con tu esposa
no sea que de pronto
se te caiga una losa
y esa cosa tan hermosa
te diga : ¡que yo corto!
¡Y a otra cosa mariposa!

¿Y ese amor de hijos…?
Voy a daros tralla
para una vez que os pillo
sin pasarme de la ralla.

No es que esté en contra
de la nueva teoría
pero nunca estáis
donde se debía.
Con el móvil vas y llamas
y te encuentras con tu gente
y al llegar coges y te paras
y ¡un mensaje “pa” Vicente!
y otro “pa” la Juana
y otro “pa” el Torrente.

Siempre habláis con los ausentes
viviendo en el futuro
se os escapa el presente
disfrutad de los amigos…
de esa buena gente
que se ríe a vuestro lado
que te mira frente a frente.

Y los padres tan tranquilos
¡si mi hijo es un bendito!
ya no sale ni de casa
estudiando “to” el ratito.
y luego,… lo que pasa
del chateo yo me irrito
en familia,… no se charla.

Pero tengo la esperanza
que al llegar la navidades
el Niño en vosotros nazca…
cuan tiempo de añoranza
y os llene de felicidades
¡de la mano de la paz….
todo se alcanza!